Haz el amor, no la guerra

El amor. 'El amor todo lo puede'. El amor es lo que mueve el mundo. El amor incondicional. El amor a todo, no solo en las relaciones, sino también hacia los amigos, los animales, nuestras cosas, nuestros recuerdos... El amor hacia nosotros mismos.
Me parece una fuerza muuy grande la del amor y me es extraño porque el amor en sí no existe, el amor no se puede describir, no se puede ver, no se puede oír, solamente se siente. ¿No os parece curioso?
Todo el mundo busca el amor, como si fueran a encontrarlo, como si fuera un objeto.
Es un sentimiento que por suerte o por desgracia, no lo puedes controlar, no puedes elegir a quién vas a querer y con cuánta intensidad. Porque perdonadme que os diga, el tiempo no influye nada. Puedes sentir mucho más hacia una persona en poco tiempo, que en otra en mucho. Eso no tiene nada que ver.
Como ya he dicho antes, no controlamos el amor, es el amor el que nos controla, se apodera de nosotros y nos hace llorar, reír, disfrutar, tener ilusión, gritar, te puede subir a lo más alto pero también te puede hundir en lo más bajo. Y eso no es por el amor, el amor en sí es bueno, lo que hace que la gente lo vea como 'el amor es una mierda' (perdonadme por esta expresión) son las personas, sus actos, sus sentimientos, porque no aman de verdad.
El amor está en todas partes. En las películas, en el teatro, en los libros, en la música, en los cuadros...
¿Qué sería de nosotros sin el amor? No seríamos nada. Las personas que no valen nada, no sienten amor, y vuelvo a repetir, no me refiero siempre al amor de pareja, me refiero al amor por algo, lo que nos guste, sea lo que sea.
Cuando me gradué en mi antiguo colegio (Juan de la Cierva) nos regalaron un libro titulado 'Lo único que queda es el amor'. La portada no me llamó la atención para nada, así que lo dejé estar. Hace unos meses (que ya había empezado bachiller) me acordé y me entró la curiosidad de por qué nos enviaron este libro, de qué iba realmente.
Si no te lo has leído, te lo puedo dejar. Debo avisarte que cada capítulo no tiene nada que ver con ninguno, son historias completamente diferentes. Fue de esos libros que al acabar te quedas en plan MADRE MÍA vaya dramas, y reflexionas.
Con 'Lo único que queda es el amor' aprendí que no hay que dejar escapar las oportunidades, que a veces es ahora o nunca, y dejamos las cosas correr porque creemos que pasarán otra vez, pero nos equivocamos y no vuelven a ocurrir nunca jamás.
Así que por favor, ama lo que realmente te guste y haz lo que realmente quieras. La vida se pasa muy rápida y si no te das cuenta, se va.
Ahora puedes pensar en lo que hablamos hace poco, de los tópicos literarios...