Esta va a ser una entrada triste, o nostálgica, o informativa, o no sé, ya se verá, pero va a tratar mucho sobre mí, de cómo me siento, de cómo me hacen sentir.
Ahora mismo estoy estudiando 2º de bachiller (social) y la verdad es que es una gran mierda. Estoy supuestamente en el peor curso, en el que a veces por mucho que lo intentes, no puedes lidiar contra algo, y te inquieta, te desmotiva, y la impotencia que sientes es brutal. Aunque lo mejor es no perder la esperanza nunca, por muy pequeña que sea. Hay que seguir intentándolo. Sí, esto es muy fácil decirlo, pero a la hora de ponerlo en marcha no es tan fácil...
Este curso es como el que te chupa las energías, el que te quita el tiempo, y a veces la motivación. Que de un mini problema se te puede hacer una bola enorme. Últimamente he estado muy apagada, no he sido yo al 100%, lo he notado. Desde que hemos acabado un poco los exámenes (finales de Noviembre) he empezado a hacer cosas que me gustan, por muy tonterías que sean. He ido al gimnasio, veo series, películas, me he socializado, e incluso he empezado a tocar un instrumento. Esto, me ha dado la vida. Me la ha devuelto. Ya hay una pequeña luz dentro de mí que quiere brillar. Empiezo a ser yo.
Después de hacer bachiller, no sé qué voy a hacer. Siempre he tenido la idea de ir a la universidad, pero la verdad es que no tengo ningunas ganas y tampoco sé qué quiero estudiar o a qué dedicarme cuando sea mayor. Las puertas a lo que quiero ser siempre se me van cerrando. Tendría que haber elegido otro bachiller, hacer otras asignaturas, etc. ¿Cómo iba a saber una niña de 16 años a qué se quiere dedicar cuando sea mayor? Si ni siquiera sabe lo que se le da bien... Y ahora el sistema educativo está volviendo a cambiar, cómo no, a peor. Ahora se les está "obligando" a elegir antes de los 16.
Así que últimamente he estado pensando, ¿para qué voy a hacer algo que no me gusta? si no lo disfruto...
Y cómo no, la asignatura que más echo de menos es literatura universal. Esas maravillosas clases, esa maravillosa profesora que te hacía desconectar, reflexionar y aprender cosas...
Esque si me pagaran por cada vez que digo "esto lo aprendí en literatura universal", sería rica. Se me viene todo a la cabeza cuando escucho decir 'esto es una odisea', 'es mi talón de Aquiles' o cuando veo una calavera en el cuarto de mi hermana y me viene toda la explicación del paso del tiempo...
De verdad que faltan más asignaturas como esta, y más reflexiones como las que nos diste, Antonia.
Ojalá las cosas cambiaran, para bien.